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Consejos para evitar el agotamiento y el cansancio

Una pareja de adultos mayores tomados de la mano.
  1. No trate de hacer todo solo. Brindar cuidados todos los días puede resultar realmente demandante. Puede que se le haga difícil ir a trabajar o incluso hacerse el tiempo para surtir las recetas o para ir al supermercado. Por eso, si un amigo, familiar o vecino le ofrece ayuda, acéptela.
  2. Ocúpese de su propia salud. Trate de hacer algo de ejercicio todos los días, incluso si eso significa solo unas caminatas cortas o hacer ejercicios con un DVD o un video en casa. Asista a las citas con su médico: muchos cuidadores están tan ocupados llevando a sus familiares a las citas que descuidan su propia salud. Recuerde ponerse la vacuna contra la gripe, hacerse las pruebas de colesterol, realizarse los controles para la presión arterial y demás exámenes anuales.
  3. Reciba la capacitación necesaria. Como la atención hospitalaria mejora, los pacientes suelen estar hospitalizados durante menos tiempo. Pero cuando su ser querido vuelve a casa del hospital, no se espera que usted sepa cómo cuidarlo sin recibir la capacitación necesaria. Deberá aprender a mantener limpia una herida y a cambiarle las vendas, trasladarlo sin dañarse la espalda y asegurarse de que tome los medicamentos correctamente. Antes de que su ser querido vuelva a casa, pídale a un enfermero del hospital que le explique estas tareas.
  4. Hágase un tiempo para tomarse un descanso. Existen muchos programas que brindan “atención de relevo” (un descanso para los cuidadores) para que pueda hacer un trámite, ir al cine con un amigo o ir al gimnasio. Su agencia local sobre el envejecimiento puede contar con los recursos para enviar un encargado a domicilio o podría inscribir a su ser querido en un programa de atención diurna para adultos.
  5. Únase a un grupo de apoyo para cuidadores. Conectarse con otras personas que comparten su misma situación puede ser la mejor manera de manejar sus propias emociones y prevenir el agotamiento y la depresión. Si no puede dejar a su familiar en casa, únase a un grupo de apoyo por teléfono, donde puede establecer una relación sólida con otros cuidadores sin tener que coordinar cuidado adicional. ¡Realmente ayuda!